La industria del Golf no está conforme sobre la Nueva Normativa Europea de Regulación de Fitosanitarios.
Se ha aprobado el borrador del reglamento europeo mediante el cual se regula el uso sostenible de productos para proteger las plantas. Las entidades del sector han mostrado su inconformidad ante este reglamento, así como la prohibición de la utilización de productos fitosanitarios químicos.
Los campos de golf son instalaciones de carácter privado ya que llevan un control de acceso, normas de uso y de comportamiento, que aleja la realidad de su gestión a la de otras zonas verdes deportivas o de ocio y disfrute.
Estos espacios aportan un hábitat tranquilo y estable para las plantas y animales por ello, para el mantenimiento de estos campos tienen un amplio catálogo de herramientas denominado Control Integral de Plagas.
Este Control incluye todas las actividades que se realizan en dichos campos como la siega, fertilización, riego… pero en ocasiones, hay desequilibrios o amenazas que este tipo de herramientas no son capaces de aliviar y por ello, se tienen que utilizar otro tipo de herramientas de control biológico, bioestimulantes o control fitosanitario.
Dentro de la agenda de 2030 de los objetivos de desarrollo sostenible, la Unión Europea ha llevado a cabo una propuesta aplicable a todos los ámbitos mediante la cual define los terrenos deportivos como zonas delicadas y se prohíbe la utilización de los productos fitosanitarios anteriormente nombrados, así como los de origen biológico o los de bajo riesgo.
Esta medida supondría la desaparición de los campos de gold en el sur de Europa como consecuencia de las diferencias climatológicas de los otros países, una mayor amenaza de plagas, afectando a su vez a otros deportes como fútbol profesional, hípica, etc.
Sin la utilización de dichas herramientas se producirían las llamadas malas hierbas que no son posibles de controlar y se perderían con la entrada del invierno y verano provocando así huecos de césped y, con ello, la pérdida progresiva de este.
En relación con el golf, si se aplicara este reglamento existirían efectos en las instalaciones ya que el no poder utilizar herramientas para el control fitosanitario haría que fuera muy complicado poder jugar en los campos ya que las zonas perderían densidad y serían tierra, la bola se llenaría de barro, etc.